En 2018 llegaron a España 65.383 personas a través del Mediterráneo. La gran mayoría, 58.569 (89,57%), llegaron a través del mar, el resto, 6.814 (10,42%), llegaron por tierra, a través de las fronteras de Ceuta y Melilla.
El año pasado, España se convirtió en el país de la Unión Europea que más refugiados y migrantes eligieron para llegar a Europa. La travesía del Mediterráneo occidental fue la ruta que más personas cruzaron y se impuso por primera vez en mucho tiempo a la del Mediterráneo oriental.
Grecia, que dominó durante el primer semestre del año la llegada de migrantes, acogió a 15.000 personas menos que España. A las costas helenas llegaron un total de 50.500 refugiados.
Por otro lado, las costas italianas pasaron de ser las más frecuentadas por los migrantes a ser las terceras, con 23.400 refugiados, casi 100.000 menos que el año anterior. La llegada de migrantes a Italia se ha visto reducida en un
80% con respecto a 2017 como consecuencia de las políticas restrictivas del gobierno de Matteo
Salvini, en referencia al cierre de sus puertos.