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CABEZA, CORAZÓN Y ALMA
El papel del director de orquesta en una producción de ópera es el de capitán de un gran barco. Exige saber coordinar las energías, los egos y los miedos, los tiempos y aspiraciones de un gran número de personas que durante tres horas están creando ‘arte en vivo’.
UN GESTOR DE ENERGÍAS
Además del buen oído y las cualidades musicales, el trabajo del director de orquesta implica ser un buen gestor de emociones propias y colectivas, trabajo en equipo, empatía, liderazgo, capacidad de diálogo y decisión. También requiere nervios de acero y resistencia física y psicológica para seguir adelante ante cualquier circunstancia.
EL LENGUAJE DE LAS MANOS
Durante una producción de ópera, el director de orquesta coordina a los músicos, a los artistas y a los técnicos; habla sin parar con todos ellos a la vez a través de su cuerpo y su mirada, a través de unas manos que no paran de trabajar.
HASTA EL 2010 NO DIRIGIÓ UNA ÓPERA UNA MUJER EN EL TEATRO REAL
La directora, Eun Sun Kim, o "la Asun", como la llaman cariñosamente sus compañeros de la orquesta titular del Teatro Real, trabaja como directora asistente del Real desde la temporada 2008/2009. Fue la primera mujer, con solo 29 años, que dirigió una ópera en el foso del Teatro Real en el año 2010. Ella se considera a sí misma "un músico entre todos los músicos".