CARTA DE MATILDE LANDA A SU HIJA CARMEN lÓPEZ LANDA (2-12-1939) - 2
En este sanatorio hay chicas muy simpáticas y nos divertimos todo lo que podemos. Yo estoy cada día más animada: canto y hasta estoy aprendiendo a bailar. Lo peor son los amaneceres: lo paso muy mal y me pongo muy triste. Ahora, aunque estoy en el sanatorio, trabajo. Cuido a las enfermas más graves, me ocupo de su plan y voy consiguiendo que algunas, que después de operadas estaban desahuciadas por los médicos, mejoren. Es un dolor muy grande cuando mueren, pero es una alegría tremenda cuando después de cuidados y cuidados, se salvan. Por eso, no quisiera que me llevasen de aquí después de mi operación. Lo sentiría. Tengo aquí cariños y amistades que no se olvidan nunca. Hoy ha venido tu tía a verme. Siempre tan cariñosa y tan buena. Ella y sus hijos se encargan de que tenga de todo - hasta flores! ¡Si vieses qué alegría me dan! Un abrazo muy fuerte para todos. Para ti muchos besos de Tu madre.
Foto: RTVE